Las dos primeras noches en la Ría de Vigo las pasamos en el náutico de Rodeira (Cangas) y como resumen deciros que necesitan con urgencia un gestor de calidad, que le aporte valor al puerto deportivo, acorde con el encantador pueblo de Cangas.
Primero, no se comunican por el canal 9 y los números de teléfonos que salen en la guía de turismo de “Instalaciones Náutico Deportivas “de Turgalicia estaban mal, saltaba el fax. Con lo cual llegamos a puerto sin saber si teníamos amarre de tránsito y en busca del marinero del puerto. Nos atendió un buen hombre que tenía un lío en forma de tabla con las plazas disponibles. Después de ir de aquí para allá en los pantalanes encontramos un amarre. Conseguimos la última plaza y casi de milagro, viendo el caos de organización.
El espacio está muy aprovechado, con lo que los amarres y los pasillos son bastante estrechos. Y no te dan ninguna tarjeta ni llave para acceder a tu barco, con lo que tienes que estar buscando al marinero para que te abra. Un coñazo. Y en cuanto a internet, nos dijo que sí que tenían wifi, pero que no se sabía la clave. :-(
Los baños estaban siempre encharcados al estar mal diseñados.
Así que nuestra recomendación para el club es que se pongan las pilas si no quieren dar imagen de improvisación, mala gestión y poca profesionalidad.
Datos de interés:
-Canal de comunicación: canal 6
-12.50€ por cada noche por el Naos (8metros)
Hay un callejón cerca del puerto imprescindible para navegantes: saliendo del puerto, al cruzar la calle se ve un callejón en cuesta. Subir y tomar a la izquierda, nos encontraremos con una buena tienda de náutica. Si seguimos caminando por esa callejuela, a mano izquierda nos encontraremos unas escaleras que dan a una chocolatería: tienen acceso wifi y ordenadores, además de un parque de bolas para niños y una carta de chocolates estupenda.
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